El BMW de 680 CV de Michael Price se conduce a toda velocidad por carretera, con Yellowstuff proporcionando la mejora de freno perfecta.
El BMW M5 con forma de F10 es sin duda uno de los coches de altas prestaciones más impresionantes que circulan actualmente por las carreteras, manteniéndose sin esfuerzo a la altura de los supercoches exóticos a pesar de su practicidad de cuatro puertas y su considerable peso en orden de marcha.
Es esta combinación de altas prestaciones y peso lo que exige especialmente del sistema de frenado del coche, lo que significa que no es de extrañar que muchos propietarios de M5 busquen mejorar sus pastillas de freno como una de sus primeras modificaciones. Ese fue exactamente el proceso de pensamiento de Michael Price, que utiliza su ejemplar modificado de 2014 con regularidad para conducir por carretera y buscaba un poco más de rendimiento, previsibilidad y fiabilidad en su potencia de frenado. Finalmente optó por el compuesto Yellowstuff de EBC en las cuatro esquinas.
El coche en cuestión es un M5 F10 de 2014, con 680 CV gracias a un remapeo personalizado y una modificación del silenciador trasero.
«He montado pastillas EBC Yellowstuff en los discos originales. Se conduce bastante duro cuando todo está a temperatura, principalmente en viajes por carretera a través del país (no días de pista). Yellowstuff es una mejora enorme sobre los artículos del OE – los cojines asombrosos que son una mejora enorme sobre la acción. Sólo necesitan unos pocos grados para que el agarre sea el mejor, entonces son fantásticas».
Michael Price’s
680 cv, BMW M5
